Este año, la Virgen de la Mesa ha permanecido inmóvil en el altar mayor de la parroquia y la misa en su honor ha dado comienzo a las 09:00 horas con la petición de los tres deseos, este año frente la pandemia.
La pandemia del Covid-19 nos ha dejado un 15 de agosto atípico.
Las multitudes del porche, los tambores de la banda, el sonido del llamador o el rachear de los costaleros acercando a la Virgen al dintel de su templo... Este año, la pandemia nos ha dejado solo el sonido de las campanas y un altar histórico con la Virgen de la Mesa presidiendo su parroquia. La situación sanitaria nos impide aglomeraciones, los templos aforados y las procesiones suspendidas.
Este año los tres deseos han sido contra la pandemia.
Para prueba de lo que perdimos este año, las imágenes de aquel 15 de agosto de 2019.
Fotografia: Rafa Peña