La pandemia de coronavirus está haciendo que estemos viviendo este año histórico en muchos de los sentidos. Si bien pudimos disfrutar de una estampa histórica desde el pasado mes de mayo en la famosa desescalada, con la Virgen de las Angustias, Jesús Nazareno y el Señor de la Oración juntos en el altar mayor, a modo de rogativa por el fin de la pandemia, ahora podemos contemplar otra estampa histórica pero diferente.
Quienes se acerquen a la capilla de San Bartolomé podrán ver que se ha producido una reorganización de los titulares. En palabras de la junta de gobierno, "este cambio viene dado porque se ha decidido iniciar un estudio destinado a detectar los problemas en la cubierta de la cúpula, y a ser posible, reparación de la misma. Esto ha obligado, por motivos de seguridad, a restringir el uso de la zona que se encuentra justo debajo, evitando el tránsito de personas y a su vez asegurando los bienes patrimoniales de la hermandad".
Así pues, la hermandad ha decidido instalar un altar provisional ubicado entre el retablo de la dolorosa y la puerta que da acceso al almacén. De nuevo el Señor de la Oración y la Virgen de las Angustias, ya ataviada de luto para este mes de noviembre, acompañan a la imagen de Jesús Nazareno, que ha abandonado su camarín. La imagen de Santa Catalina, que se encuentra habitualmente en el retablo que se ubica justo enfrente del retablo del Señor Orando en el Huerto, preside ahora el retablo de la Virgen de las Angustias.
De esta manera, los fieles podrán contemplar más de cerca a sus sagrados titulares, aunque esta nueva situación influye en el aforo del templo, que ha quedado más reducido debido a estas limitaciones. Recordamos que la hermandad ya ha recuperado el horario de invierno, siendo visitable la capilla todos los viernes, de 17:30 a 21:00 horas.
