La hermandad de los Gitanos de Utrera ha celebrado el pasado domingo el acto de veneración a la Virgen de la Esperanza, en sustitución de su anual besamanos. La dolorosa de la cofradía de la Madrugá ha dejado una estampa histórica al estar expuesta a la contemplación de los fieles durante la tarde en el dintel de la puerta del Sol de la parroquia de Santiago, que estaba engalanada para esta ocasión. Se trata por tanto de la primera imagen utrerana que ha podido casi salir de su templo desde que comenzara la pandemia.
Un acto que ha estado amenizado en varias ocasiones por una serie de villancicos, finalizando con el rezo de la Salve a Nuestra Señora de la Esperanza, cantada e instrumentada por el artista y hermano de la corporación D. David Gutiérrez García. Culminan así los cultos intensos de este año en honor a la Esperanza, que han servido para rezar por el fin de esta pandemia y para llenar de Esperanza a Utrera en estos tiempos difíciles y de incertidumbre que vivimos.
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